miércoles, 22 de febrero de 2012

Ese sonido de mi corazón seguido de un chirrido

   Cerró la puerta y se marchó. Y todas las esperanzas que me quedaban se iban disipando poco a poco, con su marcha se iban alejando de toda ilusión que aguardaba aún incluso estando en estas circunstancias. Había creído en ella hasta este punto, este punto que no sabía que existía hasta que mi corazón me avisó de su existencia, al notar el sonido de un ''clack'' dentro de mi seguido del sonido del chirrido de la puerta. Esa puerta que te empeñaste en pintar de verde, por que te recordaba a la primavera. Y ahora para que quiero yo la puerta verde ¡eh! ¡dímelo! ¡contéstame! ¡Para qué quiero yo ahora una puta puerta de color verde!. Para que quiero yo que tu recuerdo quede grabado en la entrada de aquel mundo que creamos los dos juntos, y donde estábamos tan bien. ¡Oh dios mío! Estábamos genial... ¡Por qué te vas entonces! Dímelo... ¡Con lo bien que se está! O se estaba... ven, sé que regresaras, me echarás de menos, si segurísimo. Vendrás dentro de poco suplicándome volver, lo harás, y entonces yo... Yo te volveré a recibir, como tantas veces he hecho, como tantas veces he querido que te quedases...

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