lunes, 23 de enero de 2012

You never love anyone else

   


   - Lo hice. Nuestro fin marcó uno también a una de nuestras vidas. Y lo hice, quizás no era mi intención, puede que sí, o que lo hiciese por culpa de la ira contenida. Pero lo hice, tu pusiste un fin para mí, yo puse un final para ti. Rompiste mi corazón, yo lo rompí de otra manera. Una más rápida, fácil, suave, ligero... como a ti te gustaba... ¿verdad? Y ahora tus dedos no volverán a entrelazarse con los de otra persona, tus labios no saborearán los de otros, y ni tu amor podrá dar la  bienvenida a nadie. ¿No querías un tiempo? ¡Dime! ¿No querías un tiempo? Bueno, ya es que ni sé lo que digo, me has perdido toda, entera. Pero no como la primera vez... ¡Oh Dios! Qué he hecho... lo he hecho... apreté el gatillo. No, no era mi intención, ¿o sí? Puede que sí, yo te odio, ¿qué motivos no tendría? No, no, pero eso está mal... Dios mío... Iré al infierno...
Estoy soplando el humo de mi revolver... Sí... jódete.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Opina... ♥